¿Cómo quitar los golpes de la carrocería?
Mucha gente se pregunta cómo quitar los golpes de la carrocería. Las abolladuras en la carrocería de un automóvil son bastante desagradables, pero repararlas a menudo puede resultar muy costosa.
Cuando se trata de abolladuras menores, puedes intentar repararlas tú mismo, sin tener que ir a un taller de carrocería, para ahorrar dinero. Sin embargo, debes tener mucho cuidado, porque la carrocería de un coche es muy delicada y puedes correr el riesgo de causar daños peores que los que has sufrido. Si no tienes mucha experiencia y tienes miedo de no ser capaz, entonces lo mejor es que contactes con tu taller de confianza.
Cómo quitar abolladuras en el coche.
Existen numerosos trucos para eliminar abolladuras en el coche y en algunos casos son realmente originales.
- Para abolladuras pequeñas, puedes intentar aplicar hielo en la abolladura y luego calentar la carrocería con un secador de pelo durante unos minutos. El cambio de temperatura podría ser suficiente para que el bulto se retraiga y recupere su forma original.
- Un truco similar, que siempre se basa en el cambio de temperatura, consiste en quitar una abolladura del coche con agua caliente. Esta operación puede ser suficiente para devolver la carrocería averiada a su forma original. Sin embargo, esto sólo sucede cuando la protuberancia es redonda y los bordes de la abolladura son lisos. Si no funciona, puede ser porque la chapa ha sido presionada con fuerza y es difícil volver a colocarla en su lugar con esta sencilla operación.
- Otro sistema consiste en untar un poco de lubricante (una crema como la vaselina también puede funcionar) y luego utilizar una ventosa lo suficientemente grande, como la que se utiliza para desatascar los fregaderos, para sacar la chapa empotrada, aplicando presión. Sin embargo, esta actividad debe realizarse con mucha delicadeza para que la carrocería salga lentamente, de lo contrario se corre el riesgo de dañar aún más la chapa.
Marcas de granizo: cómo quitarlas de la carrocería
El granizo es sin duda una de las principales causas de daños en la carrocería . Los daños causados por las inclemencias del tiempo, de hecho, son bastante frecuentes e impredecibles y pueden dejar marcas especialmente visibles en los coches, sobre todo cuando el granizo es muy fuerte y las piedras son muy grandes. El tamaño de los granos puede variar desde unos pocos milímetros hasta unos pocos centímetros. Si el daño es muy menor, puedes intentar repararlo con los consejos descritos anteriormente. Dependiendo del punto de la carrocería impactado y de la gravedad del granizo, se puede valorar si la carrocería sólo se retrajo o si también se dañó la pintura.
En el primer caso es posible que el daño pueda revertirse con agua caliente o hielo. De hecho, se aprovecha la expansión térmica que se genera con los cambios de temperatura. Normalmente, las partes en las que funciona mejor este método son aquellas donde la carrocería es más elástica, es decir, en las partes centrales del capó, techo y puertas.
Si, por el contrario, notas arañazos en la pintura o cuando los sellos son más extensos, es mejor contactar directamente con el taller que, con el estampador, consigue recuperar perfectamente las partes estampadas del coche sin dañar la pintura.
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